lunes, abril 26, 2010

El roce hace el cariño

LLevo muchos días pensando que las circunstancias, la vida, el estrés, la rutina que nos obceca, e incluso a veces la dejadez, nos llevan a rodearnos casi siempre de la misma gente. Un barrio donde mi familia por toca está instalada a cada esquina y donde mis amigas 'políticas' pasean día y noche, me hacen caer en la cuenta que de esa parte de 'los míos' no vivo lo suficientemente cerca como me gustaría. Aunque igualmente, si lo hiciera, quizás la realidad, mi realidad, seguiría siendo la que hoy es, visitas relámpago a casa y un pequeño de siete meses, al que veo de higos a brevas, que cada vez está más rubito y más gracioso, pero que incluso me sonríe, me da, porque me encontrará parecido a mi hermano...porque sino, no me lo explico.

Hoy me he dado cuenta, cuando un renacuajo de un año y siete meses, rubio como las candelas, con unos ojos azulitos transparentes,ha venido a mi cuando le han dicho: 'corre, daselo a tita B', y ha venido y me lo ha dado, e incluso me ha sonreido. No sé si será porque desde hace poco comparte techo conmigo, porque lo he visto crecer, o porque ciertamente, la teoría esa de 'el roce hace el cariño' se cumple en esta historia.

Pero supongo que no importa, porque si siguen existiendo padres que le hablan a sus hijos de dos y tres años de la madrina B, u otros que llevan a su nieto a ver a sus padres jubilados regalándoles vida en cada visita, o primos que al otro lado del charco te llaman por teléfono, o te escriben cartas...esas relaciones podrán desarrollarse, e incluso estrecharse si pones un poco de tu parte, claro está.

Fijate que hasta tengo la tranquilidad de que el de siete meses, llegará un día incluso que al ver mi cara dirá 'Hola tita B' :-D

Definitivamente, el roce hace el cariño, pero las relaciones humanas son mucho más que eso. Me da a mi.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

 
Free counter and web stats