Hay días en los que las circunstancias se alían para que los minutos pasen a la velocidad del rayo mientras tú andas de un sitio a otro, empezando muchas tareas, y acabando ninguna. Esos días se definen por asaltos de vagueza absoluta y cúmulos de despropósitos desfilando uno tras otro; el ordenador se peta mil veces, el tema que me toca no me gusta, el curso de html lo odio, el otro no se carga, no puedo acceder a la plataforma, empiezo una conversación que tengo que acabar por whatupp y otros dos cuadros más se acumulan junto a mis montañas de apuntes con la etiqueta imaginaria de 'pendiente'.
Definitivamente la disposición del yo, ahoga a las razones impuesta por mi conciencia, para calmar la idea de un día perdido.
Mañana será otro día.
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Los "días perdidos", como tu los llamas, compensan con otros que has vivido (y vivirás) más intensamente, no creo que sea un dia perdido, si analizas bien, seguro que sacas algo bueno del dia, por pequeño que sea.
ResponderEliminarEn cualquier caso, ya pasó :)
Beso!!!